Huellas íberas en torno a Oliete (GR 262)
Oliete - poblado íbero de El Palomar - fuente del Piejo - sima de San Pedro - poblado íbero de San Pedro
- Ida y Vuelta
- 5h 15'
- 18,9 Km
- 255 m
- 255 m
- Tipo de recorrido
- Horario completo de la ruta
- Distancia horizontal recorrida
- Desnivel de subida acumulado
- Desnivel de bajada acumulado
Sendero Turístico de Aragón
Descripción
Ruta lineal que visita dos yacimientos íberos, el de El Palomar y el de San Pedro; pasa junto a una formación geológica única en Europa y camina siguiendo el curso del río Martín y su GR 262.
El recorrido parte del Centro de Interpretación de Cultura Ibérica de Oliete, población perteneciente al Parque Cultural del Río Martín. A la salida del pueblo, dirección norte, todavía con casas a ambos lados, se encuentra marcado el camino que va hacia el yacimiento de El Palomar.
A poco más de un kilómetro desde el inicio, se encuentran los restos del poblado íbero que comenzó a cobrar vida en el siglo III a.C. y que fue destruido en las Guerras Sertorianas, en el año 74 a.C. Tras la visita, la ruta regresa al cruce señalizado y toma el camino de la izquierda, dirección este.
El recorrido está bien señalizado, hacia la sima de San Pedro y hacia el poblado del mismo nombre. Así, el itinerario marcha sobre pista asfaltada, acompañado del río Martín, que queda a la derecha. Este tramo está prácticamente inundado de campos y pequeñas huertas que pronto dan paso, sobre todo a olivos.
Tras haber recorrido 4,3 km, la ruta se desvía a la izquierda para ir en busca de la fuente del Piejo, fechada en 1894. De nuevo en el camino principal, el recorrido continúa unos metros por la pista rodada y poco después, siguiendo la señalización, toma una senda que termina junto a un poste de direcciones.
Continúa de frente y a los pocos metros aparece el desvío que lleva a la sima de San Pedro. Tras acometer una ligera subida, aparece la formación geológica, única en Europa por sus dimensiones.
De vuelta al camino principal, la ruta pasa junto a la ermita de San Pedro de los Griegos, deja el desvío que lleva a Ariño a la derecha y continúa por pista de tierra. Desde la vía, se ve en lo alto otra curiosa formación geológica, La Calapetra.
A unos 9,3 km desde el inicio, el recorrido llega a su colofón, el poblado íbero de San Pedro, del siglo III a.C.
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